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| Arte: #MentsevLook |
No me importa si un animal es capaz de razonar. Solo se que es capaz de sufrir y, por ello, lo considero mi prójimo.
Albert Schweitzer
Los animales son grandes seres. Quienes tienen mascotas pueden aprender mucho de ellos. Desde lo que hacen instintivamente para mantenerse en buen estado de salud hasta la forma en que se relacionan con nosotros.
Muchas disciplinas de autoconocimiento, como el Yoga y el Tai Chi, basaron sus técnicas en la observación de los animales para desarrollar un mejor uso de la energia.
Los aborígenes de las diferentes regiones del planeta los observan, los honran, los convocan. Utilizan la conexión con los animales como una forma de Medicina. Los llaman animales Tótems o Animales de Poder. Son los espíritus protectores de cada persona, que nos ayudan tanto en nuestra vida cotidiana como en nuestra búsqueda espiritual.
Siguiendo esa linea, pero de una forma menos mística, en las ciudades encontramos terapias apoyadas en el vinculo con los animales para la rehabilitación de personas. Es el caso de la equinoterapia, delfinoterapia y tantas otras formas. Creo que una de las curas más fuertes con estos animales es la ausencia de juicio y crítica hacia la persona con la que se vinculan.
Hay un libro hermoso de Vitus Dröscher, "Sobre Vivir", donde describe el comportamiento animal en diferentes circunstancias: el cuidado de la salud, el estrés, la conquista de una pareja, la lucha por el territorio, el descanso, etc. Son diferentes aspectos que también se nos juegan a los humanos y es muy interesante observar la gran diversidad de formas que la naturaleza tuvo de resolverlos. Ese libro es, para mi, fuente de inspiración.
La propuesta de hoy es conectar con la gratitud hacia los animales. Recordar los momentos en que pudiste interactuar con ellos, lo que te brindaron. Si tenés mascotas o alguien muy querido tiene, podes agradecer lo que ese ser aporta a sus vidas.
La mayor expresión de esa gratitud es cuidarlos, reconocer que tienen tanto derecho a la vida como nosotros, aprender a convivir sin utilizarlos, esclavizarlos, ni someterlos a sufrimiento para el beneficio personal.
Gracias a todas las personas que cuando ven un animal sufriendo, lo ayudan a reponerse, encontrar hogar o volver a su hábitat natural. A todos los que se toman el tiempo de leer las letras chiquitas de los productos que compran, para verificar si algún animal está siendo sometido. Gracias a todos los que expresan el amor a la vida en los animales.
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